...SÍ, CONTIGO. SÓLO CONTIGO.
Domingo.
El ciclo, la rueda, la vida.
Así que respiro bien fuerte...
Y espero que tú me respires también.
Así lo empezaremos juntos.
Por lo que esta vez será diferente.
Y mejor.
..Y sentarme, embelesado, al borde mismo de tu alma, para observar cómo en tus inmensos ojos chocan con rabia constelaciones enteras y cómo en tu sedosa piel se posan, frágiles, miles de estrellas en forma de pecas.
Ver cómo la luna hace de tu melena una mágica catarata con su reflejo y entender cómo en tu cuello caben todas las combinaciones de besos posibles.
Y saber, en ese momento, justo en ése, que siempre fuiste tú, y nadie más que tú, amor.
Recuerdo haberte soñado con tremenda intensidad
Bella, incólume, sublime y con aire a divinidad.
Observarte absorto, enamorado, casi platónico
Cada gesto, tu mirada, tus ojos de fuego y tu lunar icónico.
Recuerdo el calor, el fuego interno, el ansia y las ganas
Tu pasividad, altanería, superficialidad y desgana.
Siempre en otro nivel, otra liga, otro mundo diferente
Dejando bien claro que ni eras ni eres para toda la gente.
Qué lástima aquel ruido de fondo estropeando la escena
Estúpido y maldito despertador que todo lo destruye y quema...
Sí, contigo. Sólo contigo.
Bailar, como locos, hasta el amanecer.
Soñar, despiertos, planes juntos que hacer.
Llorar, emocionados, por secretos que nos unen.
Empujar, febriles, a todos quienes no sumen.
Cantar, con rabia, baladas que nadie antes cantó.
Follar, brutalmente poseídos, como nadie jamás vio.
Sí, contigo. Sólo contigo.

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