LOCURAS VARIAS DEL CORAZÓN, VOL 3.


Anoche me dijiste que no podías verme.
Llamé a mis amigos, nos reímos, bebimos de más, bailamos, 

nos drogamos demasiado y cerramos todos los bares míticos.

Vacilamos a la poli y no nos pegamos porque no quisimos.

Fue una jodida noche histórica!

Pero fue una noche de mierda, porque no podías verme..

 

 

El día que aprenda a quererme iré a por ti.

Y te daré todo aquello que ahora, está roto o torcido.

Todo será tuyo, yo lo primero.

El día que aprenda a quererme.

Hasta entonces, ten paciencia conmigo.

Soy la vacuna en fase de prueba, la droga en etapa experimental.

Soy un boceto.

 

 

De las malas ideas, nacen las noches más memorables.

De la improvisación a veces surge la auténtica magia.

De "no debería" se inician experiencias vitales únicas.

Del desastre vienen increíbles y nuevas revelaciones.

Así que valor, agarra la vida y empújala bien fuerte.

Que se entere quién manda.

 

 

He montado en coche a 220 km/hora.

También en paracaídas.

En las cintas de puenting.

En moto con un loco, rozando el suelo.

He manejado navajas de doble filo. 

He corrido delante de mucha policía.

He cometido locuras potencialmente mortales 

influido por drogas ya de por sí peligrosas...

...Y nada es comparado al peligro de tus caderas.

Al miedo a tus grandes pechos orgullosos.

El pavor de no ser para tanto a tu lado.

A engancharme, cual vulgar heroína, a tus besos.

A perderme hipnotizado en tos ojos o a enredarme sin salida en tu pelo.

Querida, no sabes cuánto me aterras... y por eso te amo.

 

 

A veces toca no querer, no poder, no saber y no hacer. 

Toca refugiarse en uno mismo ante el miedo 

a que te caigan encima pedazos de las ruinas de los demás. 

A veces toca hacerse bola porque el mundo es hostil, feo y aburrido. 

Toca poner barreras que salvan, dan luz, salud y generan paz...

  

 

Ahora mismo moriría por perderme en tu piel.

Por vagar libre entre tus sinuosas curvas.

Por viajar a través de ríos de sudor y saliva, tuya y mía.

Por trazar el glorioso mapa de tus senos. 

Por recorrer una constelación de lunares que me llevan directo a tus labios. 

Y después, subir a tu boca...

 

 

El día que te ame, lo sabrás.

Cada puta célula de tu espectacular cuerpo lo sabrá.

Cada vello erizado, pezón endurecido y estremecimiento de tus muslos... lo sabrán.

El día que te ame, lo sabrás.

Vivirás sólo el presente y las locuras parecerán normales.

El día que te ame, lo sabrás. Créeme.

 

 

No es amor si no provocas su risa.

No es amor si no compartís lágrimas.

No es amor si no se eriza la piel.

O se pone la bobalicona sonrisa automática.

No es amor sin deseo, sin admiración o sin confianza.

Ni es amor si no cedes encantado.

No es  amor si los silencios incomodan.

 

Es amor si hay una optimista incertidumbre.

Si brotan planes para 2.

Es amor si se expresa en voz alta, sin temor.

Es amor cuando la pasión viene en el pack.

Y cuando el sexo pasa a ser algo más que sudar y gemir.

Es amor cuando pasas a ser el segundo.

Y cuando el mundo entero importa menos.

 

Si lo veis, admiradlo.

Si lo sentís, decidlo.

Si lo queréis, buscadlo.

Si lo tenéis, cuidadlo.

Si lo perdéis, llorad fuerte.

Si lo envidiáis, sufrid.

Si no os gusta, seguid vegetando por el gris mundo.

Si lo controláis, lo perderéis.

Abrazad, besad, follad, cuidad y, quizás, llegue...

 

 

Quizás el problema sea yo.

Que no dejo que me pase nada.

Que no dejo que me pase alguien.

Que no dejo que me pase la vida.

Quizás el problema sea yo.

Por ponerle puertas al campo.

Por ponerle etiquetas al mundo.

Por ponerle optimismo al día.

Sí, es obvio que el problema soy yo.

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